

Con el propósito de contribuir al cuidado de la juventud tarijeña, la Universidad Católica Boliviana «San Pablo» Sede Tarija, a través de su Instituto de Investigación de la Familia (IFAT), presentó los resultados del estudio “Factores de depresión en estudiantes de la ciudad de Tarija”. Esta investigación se realizó de manera conjunta con el INTRAID y otras instituciones aliadas.
El estudio, que consultó a 589 estudiantes de secundaria, permite comprender de forma científica las necesidades afectivas de los adolescentes.
Hallazgos Principales
Mediante la aplicación del Inventario de Depresión de Beck (BDI-II-A), el estudio arrojó que el 56,2% de los participantes presenta algún grado de sintomatología depresiva.
- Niveles de gravedad: El 38,7% de la muestra se sitúa en niveles de depresión moderada o severa, condiciones que sugieren la necesidad de evaluación clínica especializada.
- Sintomatología recurrente: Los indicadores más frecuentes incluyen fatiga crónica, alteraciones del sueño, autocrítica persistente y sentimientos de culpa.
Factores de vulnerabilidad y entorno social
La investigación identifica una disparidad de género significativa: las estudiantes presentan una puntuación media de 20,84 puntos, frente a los 13,95 de los varones. Esta diferencia es más acentuada en los cuadros de mayor gravedad, donde la tasa en mujeres (26,0%) triplica a la masculina (9,6%), evidenciando una vulnerabilidad que requiere un acompañamiento diferenciado.
Asimismo, el estudio sitúa un punto de especial atención a los 15 años (4.º de secundaria), etapa que registra los índices más altos de malestar emocional (media de 19,92 puntos). En este contexto, el informe señala que un 27% de los jóvenes ha manifestado pensamientos relacionados con la ideación suicida, con un 6,6% en una situación de riesgo inminente, lo que subraya la importancia de una detección temprana.
Finalmente, se ratifica que el apoyo familiar es el principal factor de protección, aunque un 17,5% de los adolescentes percibe fragilidad en su entorno hogareño. En el ámbito escolar, persiste una barrera de comunicación: el 40% de los estudiantes no acudiría a sus docentes ante sentimientos de tristeza, lo que motiva a la universidad a proponer el fortalecimiento de los gabinetes psicológicos y la formación en escucha empática para los educadores.
Propuestas y compromiso institucional
A partir de estos hallazgos, el IFAT enfatiza la importancia de activar protocolos de detección temprana en el ámbito escolar y establecer rutas de derivación efectivas, considerando que el 75% de los afectados no ha accedido a apoyo profesional. Asimismo, se promueve la corresponsabilidad de los padres en el cuidado de los hábitos de sueño y el uso de la tecnología. Con esta evidencia, la UCB Tarija reafirma su misión de poner el conocimiento científico al servicio del bienestar y la esperanza de nuestra juventud.
